El Tipo, que Jamás me Dijo su Nombre

Pablo Di Masso
Nada
2006
70 x 100 cm
Pablo Di Masso
Nada
2006
70 x 100 cm
pablodimasso.com.ar

El Tipo, que Jamás me Dijo su Nombre

Lunes, 07 de Diciembre de 2009 07:12 a.m.
Re: Solicitar Permiso

Pablo Di Masso

Caro Augusto,
esperaba que este personaje no apareciera entre tus enviados. Porque es un enviado. El tipo, que jamás me dijo su nombre, no tiene más historia que ésta: vio el infierno.

Según su relato, el último día en el que habló, por lo menos conmigo, no había nada que hacer. Eso dijo "ya no hay nada que hacer".

Confieso que me dejó tan helado como sorprendido; y un segundo después, como si el tiempo jugara en contra, y sabemos que siempre juega en contra, tuve como una oleada de pánico que desapareció de inmediato. Pero fue suficiente.

Experimenté la nada. Su nada y, seguramente, la de todos. Aunque preferiría que ese momento, en lo posible, al menos se retrasara cuanto fuera posible en la vida de la gente. Al menos de la gente que merece ese apelativo.

Mucho tiempo después, cuando me sentí con fuerzas como para echarle un vistazo a la memoria y tratar de hacerle frente a ese infierno que había presentido, pero que él, el Hombre Nada había visitado, me di cuenta de que ese instante de maligna inspiración es el secreto de la vida. De la vida que se acaba.

No me gustan demasiado los melodramas ni las definiciones acerca de que la muerte comienza ya en el vientre materno. Es una idea horrible considerando que uno es responsable de la especie y, también, del aniquilamiento de la especie.

Pero ahora es el turno de Nada. "Fue como si me asomara a un balcón y observara, en vivo y en directo, sucediendo todo el tiempo y no sólo cuando yo miraba, el cuadro de El Bosco. Y en él... todo cuanto hoy uno comprende a saltos, en los picos de pena infinita, y no constantemente, porque entonces sería es espanto en estado puro".

Yo no dije nada porque había estado procurando no asomarme a ese balcón cuya barandilla tenía, lo entendí entonces, a buen recaudo. A fin de cuentas uno busca como un desesperado la felicidad. ¿O no?

"Vi que todo lo que más dura es el dolor, la desesperación, el triunfo de los criminales, la impunidad de los corruptos, el cinismo de los políticos y la condena de la muerte. Una muerte que nunca es limpia ni decente. Siempre es obscena".

Añadió la frase sin mirarme y yo, que gracias a su monólogo podía ponerle figuras a esa demencia, pude racionalizarlas, enjaularlas en un espacio soportable, controlar el desasosiego mortal que había detectado mínimamente pero con el que él vivía todo el tiempo. Y entonces añadió: "Todo lo que veo es nada, NADA, comparado con su significado para el hombre que me habita. Somos un pedazo, un pedazo muy pequeño, de olvido. Somos nada."

Y ya no habló porque... ¿acaso hay algo más que se pueda agregar a esa mirada de cancerosa lucidez?

Un abrazo. Pablo.

Muchas gracias Pablo !

Pablo Di Masso
Nada
2006
70 x 100 cm

  1. Pablo Di Masso
    Nada
    2006
    70 x 100 cm: pablodimasso.com.ar

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